Pese al despliegue de 5 mil policías estatales y municipales, solo 25 personas se manifestaron en la Explanada de los Héroes, frente al Palacio de Gobierno de Nuevo León, para pedir justicia por el asesinato de Giovanni López en Jalisco.
El anuncio de una protesta de estudiantes y activistas de agrupaciones civiles este domingo puso en alerta a las autoridades de la ciudad de Monterrey, pero la concurrencia fue escasa.
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Los manifestantes mostraron cartulinas para exigir justicia por el asesinato de López, quien fue detenido por la policía en Guadalajara, pero entregado muerto al día siguiente.
Las pancartas tenían leyendas como “la policía no nos cuida, nos violan, acosan y asesinan”, mientras gritaron consignas como “¡Giovanni no murió, lo mató la policía!”, y “Estudiar y aprender para chota nunca ser”.
Los negocios en el centro de Monterrey se prepararon desde temprano para la manifestación donde se esperaba una gran cantidad de personas.
A través de redes sociales, circulaba una invitación para que los ciudadanos se unieran a la protesta, que estaba planeada para las cinco de la tarde.
Desde horas antes, un helicóptero sobrevoló el área mientras elementos de la Fuerza Civil y de la Policía Municipal recorrieron calles del centro de la ciudad.
El caso de Giovanni en Jalisco
En el estado de Jalisco, la gente también ha salido a las calles a protestar por la muerte de Giovanni López.
La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) denunció que recibió informes que indican que se desconoce “el paradero de varias personas” detenidas el viernes en las inmediaciones de la Fiscalía General de Jalisco, durante las manifestaciones.
Además, Óscar Arturo Díaz Torrejón, abogado del policía Salvador Perea Rodríguez, uno de los dos detenidos por posibles violaciones a los derechos humanos en las protestas del 5 de junio en Guadalajara, dijo que están “tratando de lavarse las manos” tanto la Fiscalía General de Jalisco como el gobernador Enrique Alfaro.
