El remdesivir es un medicamento que aumentó las expectativas como posible tratamiento para el Covid-19 y atrajo la atención internacional hacia la compañía Gilead Sciences. Pese a los millones de dólares que invirtió el gobierno estadounidense en el desarrollo del medicamento, no podrá intervenir en la decisión del costo comercial que la compañía le asigne.
Para avanzar en el desarrollo de un medicamento potencial contra el Covid-19, Gilead necesitaba la ayuda de los contribuyentes de impuestos estadounidenses. Tres agencias federales de salud estuvieron involucradas en el desarrollo del remdesivir, proporcionaron decenas de millones de dólares para apoyar la investigación. Sin embargo, ahora el papel del gobierno consiste en un enfrentamiento político sobre los precios y el acceso al medicamento.
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A pesar de los subsidios, las agencias federales no logran obtener los derechos de patente del medicamento de Gilead. Potencialmente, el remdesivir podría representar un gran éxito para la cura del Covid-19 y valer miles de millones de dólares. Esto significa que Gilead tendrá pocas restricciones cuando establezca un precio comercial para el medicamento.
Mientras tanto, los críticos instan al gobierno de Estados Unidos a adoptar un enfoque más agresivo.
Sin el apoyo económico de gobierno, Gilead no habría logrado desarrollar el medicamento
“Sin la inversión pública directa y los subsidios fiscales, este medicamento aparentemente habría permanecido en la basura junto con el resto de las medicinas que no tuvieron éxito”, dijo Lloyd Dogget, presidente del subcomité de salud de House Ways and Means.
El Washington Post reportó que hace siete años, Robert Jordan, un científico de Gilead, convenció a la compañía de reunir una biblioteca de mil moléculas desechadas para buscar medicamentos para tratar los virus emergentes. Muchas enfermedades virales no atraen el interés comercial porque carecen de potencial para grandes ventas.
Para desarrollar un medicamento haciendo uso de la biblioteca de moléculas, Gilead necesitaba el apoyo económico del gobierno estadounidense. Ahora, gracias a la inversión, las investigaciones para el desarrollo del remdesivir como una cura para el Covid-19 continúan avanzando.
