Por Tania Rosas
Este año, 21 entidades federativas contrajeron deudas millonarias en los bancos y entre sus fuentes de pago se encuentra el Fondo General de Participaciones, el cual, de acuerdo con gobernadores, tendrá un ajuste a la baja en plena pandemia de Covid-19.
Se trata de 78 obligaciones financieras por un monto total de 62 mil 442 millones de pesos que este año inscribieron 21 entidades federativas en el Registro Público Único de Financiamientos y Obligaciones, a cargo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Con dicho monto se podrían pagar los gastos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, que incluye la Guardia Nacional, pues el presupuesto 2020 aprobado para esta dependencia es de 60 mil 150 millones de pesos.
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Los estados que se endeudaron en los primeros cuatro meses y medio del año son: Baja California (2 obligaciones financieras), Baja California Sur (1), Chiapas (1), Chihuahua (7), Colima (1), Durango (5), Guanajuato (1), Guerrero (1), Jalisco (3), Estado de México (1), Michoacán (6), Morelos (1), Nayarit (4), Nuevo León (15), Oaxaca (6), Quintana Roo (1), Sonora (4), Tabasco (5), Tamaulipas (2), Veracruz (9) y Yucatán (2).
En la revisión hecha por Latinus, se identificó que la entidad con mayor endeudamiento es Veracruz, gobernada por Cuitláhuac García, con 17 mil 522 millones de pesos. En la lista sigue Oaxaca, administrada por Alejandro Murat, con 14 mil 310 millones de pesos; Michoacán, a cargo de Silvano Aureoles, con 8 mil 558 millones; Nuevo León, con Jaime Rodríguez Calderón a la cabeza, con 4 mil 941 millones, y Tabasco, de Adán Augusto López Hernández, con 2 mil 500 millones de pesos.
La posición número seis de los estados con mayor deuda inscrita este año la ocupa Jalisco, a cargo de Enrique Alfaro, con 2 mil 482 millones de pesos contraídos con instituciones financieras; le sigue Chihuahua, gobernada por Javier Corral, con 2 mil 400 millones; Guanajuato y Estado de México, a cargo de Diego Sinhué Rodríguez y Alfredo del Mazo, respectivamente, con mil 500 millones de pesos; Sonora, a cargo de Claudia Pavlovich, con mil 250 millones; y Baja California, administrada por Jaime Bonilla, con mil millones de pesos.
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Las obligaciones financieras se contrajeron para cubrir insuficiencias de liquidez de carácter temporal, para destinarlo a inversión pública productiva o para el refinanciamiento de deuda y entre la garantía de pago se comprometió el Fondo General de Participaciones, el cual se constituye con el 20% de la Recaudación Federal Participable.
Sin embargo, en medio de la pandemia de Covid-19, el gobernador de Nayarit, Antonio Echevarría, adelantó que la Secretaría de Hacienda prevé “un importante recorte de 89 mil millones de pesos”, aunque el titular de la SHCP negó la disminución en las participaciones.
El jueves pasado, durante una videoconferencia con el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, los mandatarios estatales demandaron recursos extraordinarios para hacer frente a los gastos por el Covid-19. El presidente de la Comisión Nacional de Gobernadores (Conago), Carlos Mendoza Davis, advirtió que la situación financiera es insostenible.
Mientras tanto, los gobernadores de Nuevo León, Coahuila, Tamaulipas, Durango, Michoacán, Colima y Jalisco adelantaron que siguen la ruta legal para presentar ante la SHCP, “la solicitud del pago resarcitorio de los gastos transferidos por la Federación” a las entidades para la atención de la pandemia.
