Al cierre de este inicio de semana, el peso mexicano retrocedió en línea con la mayoría de las monedas emergentes y cotiza en 23.64 por dólar.
En ventanillas bancarias, el dólar se vendió en 24.07 pesos y se compró en 22.87 de acuerdo con datos de BBVA.
La moneda nacional registró un retroceso del 1.81% frente a las 23.33 unidades del precio de referencia de Reuters del viernes.
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Analistas de distintos grupos financieros explicaron que debido a las fluctuaciones en los precios del petróleo se generó volatilidad en las monedas de países emergentes.
Además explicaron que tanto en el corto plazo como en el largo, las probabilidades favorecen a un sesgo alcista sobre el tipo de cambio del peso mexicano.
“Consideramos que el alza reciente podría tratarse solo de la primera fase de un movimiento alcista que podría extenderse hacia finales del año, cuyo siguiente objetivo se ubica en 26.50”, dijo Juan Francisco Caudillo, analista de Monex.
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La bolsa mexicana subió un 0.13% a la espera de que se publiquen más reportes trimestrales, tanto en Estados Unidos como en México, que puedan dar dimensión a los efectos económicos y financieros de la epidemia de coronavirus.
En tanto, el referencial IPC avanzó a los 34.613,67 enteros integrado por las acciones de las 35 firmas más líquidas del mercado.
