Llegar a una liga profesional en Estados Unidos se considera una proeza por la cantidad de talento que hay disponible y las altas exigencias que el profesionalismo tiene… Triunfar en dos de estas ligas al mismo tiempo debe entenderse como un hito.
Aunque no fue el primero en hacerlo, Deion Sanders puede considerarse el atleta que más éxito tuvo al jugar en la NFL y las Grandes Ligas al mismo tiempo, consiguiendo tremendos números y poniendo a Estados Unidos de cabeza. Aunque históricos como Bo Jackson o hasta Michael Jordan lo intentaron, Sanders es el atleta que mejor lo ha hecho.
Nacido en Florida en 1967, Sanders demostró desde su juventud increíbles aptitudes prácticamente para cualquier deporte que practicaba, lo que rápidamente lo llevo a ser considerado uno de los atletas más talentosos del estado. En 1985 fue elegido en el draft por los Reales de Kansas City, aunque no firmó y prefirió tomar una beca en la Universidad de Florida State.
Su talento era todo menos invisible y en 1988 las Mayores montaron una segunda ofensiva, fue seleccionado por los Yankees de Nueva York y se unió a la novena para debutar el 31 de mayo de 1989 en la Gran Carpa. Permaneció ahí hasta 1991, cuando se unió a los Bravos de Atlanta.
En el otro lado de la moneda, los Halcones de Atlanta seleccionaron a Sanders en 1989 con la quinta selección global. Ese año se convirtió en el primer deportista en la historia en anotar un Touchdown y pegar un cuadrangular en la misma semana.
Por si fuera poco, estuvo muy cerca de jugar un partido en cada una de las ligas más importantes de Estados Unidos el mismo día. El 11 de octubre del 92’, luego de disputar un partido frente a los Delfines de Miami, tomó un avión a Pittsburgh para unirse a los Bravos para estar en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, aunque no fue parte del line-up.
A pesar de perder ese partido, su equipo se llevó el Campeonato de la Nacional y avanzaron a la Serie Mundial, que posteriormente perderían ante los Azulejos de Toronto.
‘Prime Time’ se convirtió en un fenómeno, jardinero en el diamente y defensivo y regresador de patadas en el emparrillado, una muestra de atleticismo en toda su extensión.
En la NFL, tras seis temporadas con Atlanta, emigró a los 49’s de Steve Young en el 94’. Con los californianos llegó al Super Bowl XXIX para llevarse su primer anillo de campeonato tras derrotar a los Cargadores. Sander se apuntó entonces el honor de ser el primer jugador estadounidense en disputar una Serie Mundial y un Super Tazón.
En 1995, ‘Neon Deion’ llegó a los Vaqueros de Dallas comandados por Troy Aikman. Con el equipo de la Estrella Solitaria sumó su segundo anilo de campeón. Se convirtió entonces en el segundo jugador en toda la historia en conquistar Super Bowls consecutivos con equipos diferentes, igualando a Ken Norton.
En la MLB, al partir de Atlanta, firmó con los Rojos de Cincinnati, después con los Gigantes de San Francisco, para volver una y otra vez a los Rojos hasta que abandonó el beisbol.
Sanders se mantuvo en Texas hasta 1999, para después firmar un contrato por ocho años y 56 millones de USD con los Pieles Rojas de Washington.
Solamente cumpliría un año de ese contrato para después anunciar su retiro del profesionalismo.
Tras tres años de inactividad, Sanders decidió volver a la NFL para disputar un par de temporadas con los Cuervos de Baltimore, equipo con el cual interceptó para regresar a las diagonales por novena ocasión, empatando a Ken Houston y Aeneas Williams en el segundo puesto histórico, sólo detrás de las 12 de Rod Woodson.
Así, Deion Sanders disputó 14 campañas en la NFL, para un total de 188 juegos con 157 titularidades. Durante este tiempo registró 513 tacleadas, una captura, 10 fumbles forzados y 53 intercepciones para 1,331 yardas.
Fue llamado en ocho ocasiones al Pro Bowl entre 1991 y 1994 y 1996 y 1999. En su año con los Gambusinos, fue nombrado Defensivo del Año y fue electo al mejor equipo de la década de los noventa.
