Cal Ripken Jr. ha lanzado una campaña para ayudar a alimentar a niños y familias en todo Estados Unidos durante la pandemia de COVID-19, coordinando una contribución de 250 mil USD y abriendo una cuenta en redes sociales para promover la causa.
Ripken estuvo toda su carrera con los Orioles de Baltimore hasta su retiro en el 2001. Impuso el record de más partidos jugados de forma consecutivea con 2,632 e ingresó al Salón de la Fama.
Actualmente, su enfoque está en ayudar a familias impactadas económicamente por el coronavirus, pero también espera el regreso de los equipos de beisbol al diamante.
El ex toletero cree que la MLB puede ser un importante bálsamo para el comienzo de la recuperación de Estados Unidos.
“Tuve la oportunidad de presenciar los efectos del beisbol para superar tiempos difíciles. Despues del 9/11, el beisbol jugó un papel maravillosa en la recuperación nacional. Si podemos regresar a eso, sería un retorno a la normalidad que estamos buscando en estos momentos”, comentó.
Pero hasta que eso suceda, ‘Iron Man’ ayudará a los que lo necesitan. La Fundación Cal Ripken Sr se ha aliado con Ollie’s Bargain Outlet y la Fundación Kevin Harvick para comprometer un cuarto de millón de USD a la campaña Strike Out Hunger.
Ripken había manejado un bajo perfil desde su retiro, pero abrió una cuenta de Twitter para esparcir la voz.
“Me gustaba mi privacidad aún cuando vivía una vida pública. Cuando veía las redes sociales, las veía como una invasión a la privacidad. Ya no lo veo así”, dijo
En los último 19 años, la Fundación Ripken se ha dedicado a implementar programas de desarrollo juvenil y la creación de parques para jóvenes en riesgo en comunidades pobres. Durante la epidemia, ha decidido cambiar el enfoque hacia las necesidad más urgentes.
“Tenemos la infraestructura y los recursos para ayudar ahora. Planeamos hacerlo hasta que las cosas regresen a la normalidad”, apuntó
Ripken ayudó al beisbol a recuperarse luego de la huelga que obligó a la cancelación de la Serie Mundial de 1994, lo que hizo que los dueños consideraran usar reemplazos para la siguiente temporada.
Se alcanzó un acuerdo y la búsqueda de Ripken por el récord de 2,130 juegos consecutivos de Lou Gehrig, fue un factor para traer a los aficionados de vuelta.
“Fue una manera mágica de volver a lo que la gente amaba del beisbol”, concluyó
