El exfutbolista alemán, Andreas Brehme, puso a subasta el balón de la Final del Mundial de Italia 1990, en la que Alemania se impuso por 1-0 a Argentina gracias a un gol de penalti del propio Brehme, para recaudar fondos para la lucha contra el coronavirus.
Brehme quiere ayudar con esta iniciativa especialmente a las víctimas del COVID-19 en Italia, en donde militó entre los años 1988 y 1992 en las filas del Inter de Milán, con el que conquistó una Liga en 1989 y la Copa de la UEFA en 1991.
La puja por el balón, firmado por todos los integrantes de la selección alemana, ha alcanzado ya una cifra de 3,150 euros, una cantidad que se espera que aumente antes del fin de la subasta, prevista para el próximo 6 de mayo.
El balón de la final disputada en estadio Olímpico de Roma no es el único objeto puesto a subasta por Andreas Brehme, que también ha cedido otro esférico, en este caso de entrenamiento, también firmado por los integrantes de la Alemania campeona del mundo en 1990.
Como se recordará, Brehme marcó de penalti en aquella final, en una de las decisiones más polémicas en la historia de las Copas del Mundo, que tuvo como protagonista al árbitro uruguayo naturalizado mexicano, Edgardo Codesal.
Con información de EFE
