El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este viernes un paquete de apoyo económico de 2.2 billones de dólares para ayudar a millones de estadounidenses, a los servicios de salud y a las empresas del país ante la crisis desatada por el COVID-19.
La firma se dio sólo unas horas después de que la Cámara de Representantes aprobó la medida, y a menos de 48 horas de que el Senado la aprobara por unanimidad.
“Quiero agradecer a los demócratas y republicanos por unirse y poner a Estados Unidos primero”, dijo Trump.
Ahora, la Casa Blanca, el Departamento del Tesoro, la Administración de Pequeños Negocios y otras agencias deben apresurarse para distribuir este monto. La ley autoriza al Tesoro a enviar pagos de mil 200 dólares a millones de estadounidenses y crea programas para repartir cerca de 1 billón de dólares en préstamos comerciales y garantías a empresas.
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El paquete permitirá enviar pagos de hasta mil 200 de dólares por persona a millones de estadounidenses y reforzará los beneficios de desempleo. También ofrecerá préstamos, subsidios y exenciones impositivas a empresas grandes y pequeñas.
Estados y gobiernos locales recibirán una inyección de miles de millones, al igual que el sistema de atención médica.
Este histórico paquete también incluye 50 mil dólares en créditos para empresas que tengan a sus empleados en nómina y cubrirá el 50% de los sueldos.
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En cuanto a estímulos fiscales, las empresas podrán diferir el pago de impuestos de 6.2% al Seguro Social. Esta medida busca evitar que las empresas despidan a los trabajadores.
La firma del estímulo económico es otra de las medidas que tomó el presidente Trump ante el brote de COVID-19. Semanas antes había restringido el acceso a vuelos provenientes de la Unión Europea y Reino Unido.
La semana pasada, la Administración de Trump acordó cerrar parcialmente la frontera con México para evitar la propagación del COVID-19. Desde la madrugada del sábado pasado está restringido el acceso para los viajes “no esenciales”. Solo están permitidos los viajes de alimentos, combustible y medicamentos.
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La presidenta de la Cámara de Representantes de EU, la demócrata Nancy Pelosi, no estuvo presente en el momento de la firma.
