José Saturnino Cardozo marcó 29 goles en un torneo corto (Apertura 2002). Esa es la carta de presentación de uno de los mejores extranjeros en la historia del futbol mexicano.
Pepe se cansó se romper redes en suelo azteca, enfundado en una piel de diablo que era el terror de sus rivales. El paraguayo que hoy cumple 49 años era un delantero total.
Gracias a todos por sus felicitaciones !!! Bendiciones
— José Saturnino Cardozo (@pepecardozo249) March 19, 2020
Llegó a Toluca a mediados de los 90 y su irrupción no fue inmediata, pues entre las lesiones y que estuvo relegado a la banca, le costó trabajo tomarle el pulso a un nuevo balompié. Sin embargo, todo fue cuestión de tiempo para conocer los alcances de este goleador de cepa.
Una década vistió de escarlata, ganó cuatro títulos de Liga, cuatro títulos de goleo y marcó 249 goles que lo instalaron en el salón de los inmortales como el cuarto futbolista con más anotaciones en la historia del futbol azteca, detrás de Cabinho (312), Carlos Hermosillo (294) y Jared Borgetti (252).
Fue parte de un Toluca memorable que brindaba espectáculo, donde lucían Hernán Cristiante, Sinha, Vicente Sánchez, José Manuel Abundis, Víctor Ruiz, Salvador Carmona, David Rangel, y desde luego, el ‘Príncipe Guaraní’.
Cardozo era letal dentro y fuera del área. No se trataba de un delantero que dependía de centros para notar, pues era capaz de generar una jugada de gol cuando la causa parecía perdida. Definía con ambas piernas, de cabeza, eludiendo rivales… Nunca tuvo límites.
“Cuando llegué al futbol mexicano uno de mis objetivos, además de ser campeón de Liga y de goleo, era anotar el mayor número de goles en un torneo. Investigué y encontré que el récord era de 29 goles; ¿quién anota tantos goles en 17 fechas? Alcanzar a Cardozo es imposible”, declaró André Pierre-Gignac en su momento, y esta sentencia del francés resume a la perfección la grandeza de José.
Cardozo ha seguido ligado a México, ahora en su faceta como director técnico, la cual no es ni cercana a lo que hizo como futbolista. Sin embargo, a Pepe se le recuerda como el ‘señor de los goles’.
