La Cámara de Diputados mexicana aprobó reformas que facilitarían a los legisladores reelegirse en el cargo hasta el 2030.
Cualquier diputado o senador podría permanecer en su posición en el Congreso mexicano aunque el partido que lo postuló ya no tuviera registro, e incluso sin pedir licencia previa al cargo.
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Con la Reforma Política de 2014, la Constitución del país abrió la puerta a la reelección legislativa consecutiva, pero está pendiente asentar las reglas para el proceso de manera secundaria.
Es decir, debe reglamentarse cómo podrían los diputados repetir su cargo hasta en cuatro periodos (en México son de tres años), y en el caso de los senadores aspirarían a la reelección en dos ocasiones (su periodo es de seis años).
En la iniciativa, la propuesta de reforma a la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales y la Ley General de Partidos Políticos se avaló con 254 votos a favor, 20 en contra y tres abstenciones.
A la sesión no acudieron los partidos “de oposición”, como son el PAN, el PRI y el PRD.
“Las y los legisladores federales que pretendan ser electos para el mismo cargo por un periodo consecutivo pueden participar en el proceso electoral sin separarse del cargo, para lo cual deberán observar estrictamente las disposiciones legales y normativas dirigidas a preservar la equidad en las contiendas políticas, así como el uso eficiente, eficaz, honrado, transparente e imparcial de los recursos públicos”, se lee en la reforma.
Otros párrafos refieren que los legisladores “deben abstenerse de participar en actos de proselitismo político durante el tiempo en que están obligados a concurrir a sesión de la Cámara correspondiente, de conformidad con lo dispuesto por los artículos 63 y 64 de la Constitución”, señala.
Además establece que “no pueden disponer de recursos públicos en sus actos de campaña o en cualquier acto de proselitismo político, así sean humanos, materiales o económicos”.
