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Coronavirus domina debate entre Biden y Sanders

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Foto: REUTERS/Kevin Lamarque

La crisis por coronavirus fue el tema que dominó el primer debate entre Joe Biden y Bernie Sanders, los dos aspirantes a la candidatura presidencial del Partido Demócrata. Ambos se saludaron con los codos, para evitar estrechar sus manos, como medida de precaución para evitar un posible contagio. El debate se realizó en Washington DC, en un estudio de la cadena CNN sin público. Originalmente estaba planeado en Arizona en un espacio más grande.

Tanto Sanders como Biden coincidieron en que Estados Unidos no está preparado para enfrentar una crisis sanitaria como la actual y que el gobierno de Trump debería garantizar que todo aquel que lo requiera, reciba atención médica gratuita. También opinaron que las autoridades deben asegurarse que nadie sufra un impacto económico derivado de esta situación.

Joe Biden afirmó que si él fuera presidente “cuidaría de aquellos que han sido expuestos al virus”. Añadió que se necesitan más camas disponibles para los pacientes y ver que todos los afectados por el coronavirus puedan tener seguridad financiera: “Nadie tendría que pagar por los tratamientos y los medicamentos en una crisis”.

Bernie Sanders dijo que los estadounidenses deben entender que no se tienen que preocupar por los gastos si tienen los síntomas. “Cuando estás enfermo, vas al doctor”, dijo en referencia a todos los pacientes que no tienen un seguro médico, ni recursos económicos para una hospitalización de varios días.

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Agregó que por el momento Estados Unidos no cuenta con el personal médico necesario para enfrentar la crisis: “El coronavirus expone la fragilidad del sistema de salud que tenemos actualmente. Hay gente que está viendo este debate sintiéndose mal y cuestionándose cómo podrían pagar el tratamiento. Las empresas farmacéuticas están lucrando con esta crisis”, dijo el senador.

¿Cómo se cuidan Biden y Sanders del coronavirus?

Durante el debate, una de las moderadoras recordó que ambos candidatos están dentro del grupo de mayor riesgo frente al coronavirus: son adultos mayores. Se les preguntó qué hacen para prevenir un posible contagio.

Bernie Sanders, quien tiene 78 años y sufrió en el pasado un ataque cardiaco, respondió  que ya suspendió todos sus actos públicos: “No estamos haciendo los rallies, de hecho nuestro equipo completo de campaña está trabajando desde casa. A nivel personal, no estoy saludando de mano. Joe y yo no nos dimos la mano. Y soy muy cuidadoso de la gente con la que interactúo. Uso jabón para lavarme las manos y gel desinfectante. Y tengo que decir que no tengo ningún síntoma y me siento muy agradecido por eso”.

Joe Biden, de 77 años, hizo énfasis en que no tiene ninguna condición preexistente como la que mencionó la moderadora, en clara referencia a que no ha sufrido un ataque cardiaco como Sanders:  “Gracias a Dios puedo decir que tengo buena salud. Estoy tomando las precauciones que deben tomar todas las personas: no saludar de mano, no estar muy cerca, no estamos haciendo actos públicos. Todo nuestro equipo trabaja desde casa. Estamos haciendo rallies virtuales. Tomo las precauciones que todos deberíamos tomar: lavo mis manos Dios sabe cuántas veces al día con agua caliente y jabón. Uso gel desinfectante muchas veces al día y me aseguro de no tocarme la cara”.

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Mujeres al poder

Durante el debate, el exvicepresidente Joe Biden aseguró que, si gana la nominación del Partido Demócrata, su fórmula incluirá a una mujer como vicepresidenta.

El demócrata de 77 años igualmente reiteró su compromiso a nombrar a una mujer afroamericana para la Corte Suprema.

El senador Sanders no se comprometió de forma contundente a tener una mujer en el segundo puesto más alto de la rama ejecutiva. “Es muy probable”, señaló, pero aseguró que él no únicamente busca nombrar a una mujer en la vicepresidencia, sino a una “mujer progresista”.

En cuanto al resto de sus gabinetes, ambos aseguraron que tendrían una mayor representación femenina, puesto que una administración debería de ser un reflejo del país.

Tanto Biden como Sanders dejaron clara su postura respecto al aborto, ambos señalando puntualmente que una mujer debería de tener el derecho de elegir sobre su cuerpo.

Biden respaldaría a Sanders. Sanders evade responder

Ambos precandidatos reconocieron en varios momentos del debate que el objetivo principal es que el Partido Demócrata venza a Trump en las próximas elecciones presidenciales de noviembre.

Por ello, Joe Biden aseguró que respaldaría a Bernie Sanders en caso de que el senador se llevara la nominación.

“No solo lo apoyaría, también haría campaña por él”, dijo el exvicepresidente.

El senador no respondió el gesto inmediatamente, pero más tarde en el debate señaló que él, como cualquier demócrata, “está preparado para hacer cualquier cosa humanamente posible con tal de derrotar a Trump”.

Biden lidera las encuestas en Florida, uno de los estados que más delegados reparte. Por ello, Sanders necesita de un buen debate para revitalizar su campaña en el tramo final de la carrera.

Inmigración

Biden y Sanders aseguraron que, de quedarse con la presidencia, pondrían un alto a la deportación de inmigrantes. El exvicepresidente señaló que únicamente expulsaría a aquellos que han sido condenados por algún delito grave.

Ambos demócratas estuvieron de acuerdo en que el país requiere de los inmigrantes y que las medidas implementadas durante la administración de Trump, entre ellas la expansión del muro fronterizo y la redadas contra indocumentados, no son las adecuadas.

“Deberíamos de darles la bienvenida”, expresó Biden, quien dijo que el futuro de Estados Unidos “depende de la comunidad latina” y que “la xenofobia es una enfermedad”.

El exvicepresidente igualmente agregó que ningún inmigrante debería de ser encarcelado mientras espera su juicio en una corte.

El senador Sanders, por su parte, criticó el “terror psicológico” que las deportaciones generan. “Los niños tienen miedo cada vez que regresan a casa porque sus padres podrían ya no estar”. Prometió que si llega a la Casa Blanca “terminará con la demonización de los inmigrantes”.

“Nadie más volverá a tomar un bebé de las manos de su madre”, agregó el senador.

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