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La industria farmacéutica de Estados Unidos busca vacuna y un tratamiento contra el coronavirus. El proceso podría tardar más de un año.
“Muchas compañías están teniendo ideas sobre cómo hacer una vacuna. Es importante intentar todas las vías posibles porque sabemos que no todas funcionan”, explicó el doctor Bruce Gellin del Instituto Vacunas Sabin en Washington, dedicado a promover el acceso global a la inmunización.
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La investigación sobre el coronavirus comenzó desde que el virus fue detectado por primera vez en diciembre en la región de Wuhan.
La industria farmacéutica de Estados Unidos anunció que en abril inician los primeros ensayos clínicos de la vacuna en humanos.
Actualmente, más de 10 grandes farmacéuticas de todo el mundo manifestaron sus esfuerzos por ser la primera en lograr una vacuna.
La empresa Moderna, con sede en Massachussets, fue la primera en fabricar una vacuna experimental que ya está siendo probada por investigadores del gobierno de Estados Unidos.
Moderna tiene previsto lanzar un ensayo clínico entre 20 y 25 voluntarios sanos. A cada uno se le administrará una dosis de la vacuna. Se espera obtener una respuesta inmune capaz de proteger contra la infección.
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La empresa Novarax en Maryland está haciendo experimentos con animales y sus pruebas con seres humanos serán en mayo.
A largo plazo, el desarrollo de una vacuna permitirá a la población fortalecer su sistema inmune frente al coronavirus. La industria farmacéutica y las universidades estadounidenses investigan la eficacia de las inyecciones de Remdesivir, un medicamento antivírico que fue creado originalmente para el ébola.
David Perryman, uno de los expertos que está desarrollando la cura para el coronavirus aseguró que el Remdesivir ya se está aplicando de manera experimental en pacientes en Estados Unidos, China e Italia.
Con información de EFE
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