Pasajeros que se encontraban varados en el crucero The Grand Princess, debido al contagio de 21 personas con coronavirus, desembarcaron en las costas de Oakland, California.
Autoridades sanitarias trasladaron en autobuses y vuelos a las más de 2 mil personas, para ponerlos en cuarentena. Aquellos que no sean estadounidenses serán devueltos a sus países de origen.
En el navío Grand Princess viajaban 3 mil 500 personas, entre pasajeros y miembros de la tripulación.
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El crucero estuvo frente a la costa de San Francisco durante cuatro días, mientras las autoridades intentaba descifrar cómo llevar a los pasajeros a tierra sin peligro de propagación del COVID-19.
El desembarco se dio en orden de prioridad, según lo definido y dirigido por las autoridades estatales y locales, señaló la cadena Princess Cruises en un comunicado en su página web.
La Guardia Costera de Estados Unidos envió equipos de Servicios de Salud y Humanos de California para ayudar con el operativo médico, la detección y las entrevistas. Además, priorizará a aquellos que requieren cuidado intensivo.
Los pasajeros en condición estable pasarán la cuarentena de 14 días en bases militares estadounidenses, luego de permanecer en el crucero en California.
La compañía dijo que trabaja en un plan para la cuarentena de la tripulación. Después de que los pasajeros desembarcaron, el barco y su tripulación se dirigieron a la bahía de San Francisco.
