La Suprema Corte de Estados Unidos volvió a debatir el acceso al aborto después de cuatro años, desde la llegada de dos magistrados nombrados por el presidente Donald Trump, quien han impulsado el giro conservador en la instancia judicial.
Los magistrados escucharon los primeros argumentos orales en su revisión de la legislación del estado de Luisiana, cuyos requisitos complicaría a las mujeres interrumpir el embarazo.
La ley estatal exige que los médicos que practican abortos tengan derechos de admisión en un hospital dentro de un radio de unos 77 kilómetros, desde la clínica donde se realiza el procedimiento.
También exige que las clínicas que ofrecen el servicio de abortos sean “pequeños hospitales” con todos los requisitos, desde el ancho de los pasillos hasta la obtención de equipos costosos.
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Se espera un veredicto para el final del actual periodo de sesiones, que concluye en junio.
En 2016, el Tribunal Supremo anuló, con una votación de 5 a 3, una ley similar del estado de Texas parecida a la que otros estados han promulgado en años recientes, dentro de una lucha constante entre quienes defienden el derecho de las mujeres a decidir sobre el embarazo y quienes se oponen al aborto.
Sin embargo, desde la llegada de dos nuevos jueces conservadores al máximo tribunal, nominados por Trump: Neil M. Gorsuch y Brett Kavanaugh, todo dio un giro.
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Los oponentes de la legislación de Luisiana argumentan que esa ley dejaría una sola clínica habilitada para los abortos, en un estado que tiene 4,4 millones de habitantes.
“El tribunal ya escuchó un caso virtualmente idéntico hace cuatro años. Ya se ha decidido que este tipo de leyes son inconstitucionales, porque son médicamente innecesarias y solo sirven para obstaculizar el derecho de las mujeres a decidir”, afirmó Catherine Cortez Masto, senadora demócrata por Nevada, en un comunicado.
“Lo único -remarcó la senadora – que ha cambiado desde entonces son los ocupantes de la banca de jueces”, finalizó la senadora.
El Tribunal Supremo aprobó en 1973 la legalización de la interrupción del embarazo en todo el país.
Durante la sesión del Tribunal Supremo, manifestantes de Pro Life y Pro Choice se manifestaron afuera del recinto.
