Estados Unidos y el Talibán firmaron este sábado un acuerdo de paz que busca poner fin a 18 años de conflicto en Afganistán.
El texto contempla el retiro gradual de las tropas estadunidenses con una reducción inicial de más de 4 mil efectivos militares en cuatro o cinco meses. Actualmente hay 13 mil soldados desplegados en Afganistán. El retiro total, previsto en un periodo de 14 meses, dependerá de que el Talibán cumpla ciertas condiciones antiterroristas. La evaluación estará a cargo de Estados Unidos.
En declaraciones tras la firma del acuerdo de paz, el secretario de Estado estadounidense Mike Pompeo dijo que Washington “aprovechó la mejor oportunidad para la paz en una generación”. Señaló que lo logrado hasta el momento “no es perfecto, pero los talibanes han demostrado que pueden ser pacíficos cuando quieren”.
También advirtió que Estados Unidos hará lo que sea necesario para garantizar la seguridad, si el Talibán no cumple lo prometido.
Puedes leer: ONU lanza plan para blindar eventos deportivos del terrorismo
El acuerdo de paz se firmó en un lujoso hotel de Doha, la capital Catar, en presencia de observadores internacionales y dignatarios de diversos países, entre ellos los ministros de Exteriores de Turquía y Pakistán, además de una amplia delegación de talibanes.
La firma del pacto fue encabezada por el representante especial de Estados Unidos para la paz, Zalmay Khalilzad, y el líder talibán, mulá Abdul Ghani Baradar. En su discurso el afgano calificó de “histórico” el acuerdo y alabó las “negociaciones exitosas” entre su grupo y el gobierno de Donald Trump. Aseguró que se trata de algo “bueno para la comunidad internacional”.
Mike Pompeo reconoció que persiste la furia porque los ataques del 11 de septiembre se planificaron en Afganistán bajo el régimen del Talibán. Aseguró que Estados Unidos no “malgastará” aquello que sus soldados “han ganado con sangre, sudor y lágrimas”.
Puedes leer: Trump nomina a John Ratcliffe como jefe de Inteligencia, por segunda vez
Tras los atentados del 2001, el entonces presidente George W. Bush ordenó la invasión de Afganistán. El ejército de Estados Unidos tardó apenas unos meses en derrocar a los talibanes. Eso obligó a Osama bin Laden y a la cúpula de Al Qaeda, a cruzar la frontera hacia Pakistán.
Sin embargo, la guerra se prolongó durante años cuando Estados Unidos intentó establecer una nieva forma de gobierno en Afganistán. Los talibanes se reagruparon y en la actualidad controlan más de la mitad del territorio afgano.
El acuerdo de paz llega después de que Washington suma un gasto de más de 750 mil millones de dólares para el despliegue en Afganistán. La guerra ha dejado decenas de miles de víctimas mortales en ambos bandos.
Con información de Agencias
