Amnistía Internacional denunció que las autoridades estadounidenses infligieron “sufrimiento extremo” y “tortura”, de forma deliberada, a inmigrantes que trataron de cruzar la frontera desde México.
La organización remarcó que la separación de familias de migrantes, realizada en 2019, provocó un “daño irreparable” a miles de personas.
Amnistía condenó las “políticas de inmigración draconianas” que puso en marcha el gobierno de Donald Trump, para restringir la entrada de solicitantes de asilo en la frontera.
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Uno de los mayores ejemplos de maltrato que presenta la asociación es el centro de “afluencia temporal” de Homestead, Florida. En este lugar los menores de edad pasaban largos periodos, después de ser detenidos.
Además, la organización afirmó que las detenciones de migrantes en la frontera de Estados Unidos y México fueron “arbitrarias”, con tratos “crueles, inhumanos y degradantes” para las personas.
La separación de familias de inmigrantes fue uno de los temas principales del informe sobre derechos humanos en las Américas, que cada año presenta Amnistía Internacional.
Los reproches contra Estados Unidos
Amnistía Internacional también hizo un fuerte llamado de atención al gobierno estadounidense por tratar de penalizar el aborto y restringir los servicios de salud reproductiva.
Asimismo, aseveró que las autoridades siguen sin proteger a la población de las armas de fuego, especialmente a las comunidades afroamericanas.
Otro de los grandes reproches contra la administración de Donald Trump fue la “guerra global” que mantiene en diferentes regiones del mundo y su renuncia a participar en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
