Los aspirantes a la candidatura presidencial demócrata participaron este martes en un debate que pronto se convirtió en una ofensiva en contra de Bernie Sanders.
Por el momento, Bernie Sanders, de 78 años, lidera la carrera con 45 delegados. Es por ello que el resto de los aspirantes dedicaron gran parte de la noche a tratar de frenar el ímpetu con el que el senador llegaba a Carolina del Sur.
Tan solo en los primeros 10 minutos del debate, ya había sido atacado por Buttigieg, Biden, Bloomberg, Warren y Steyer.
“Estoy escuchando mi nombre una y otra vez”, bromeaba el senador. “Me pregunto por qué”.
Lo que en un principio le parecía gracioso, sin embargo, pronto dejó de parecerle tal.
Rusia quiere que gane Bernie Sanders
El exalcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, aseguró que el gobierno de Putin busca que Bernie Sanders se lleve la candidatura demócrata. “Por algo te ayuda Rusia. Ellos saben que eso ayudaría a Trump”, aseguró.
Este intercambio marcó la pauta para el resto del debate. Una vez que Bloomberg dio inicio a los ataques, el resto de los aspirantes a la candidatura se fueron encima de Sanders.
El alcalde de South Bend, Pete Buttigieg, se sumó a los ataques. Aseguró que un mano a mano entre Bernie Sanders y Donald Trump sería devastadora para el país. “Si creían que los últimos cuatro años fueron caóticos, tóxicos, divisivos y desgastantes, imagínense lo que sería pasar la mayoría de este año con esa batalla”, señaló.
Los costos sin explicación
No solamente fueron los demás aspirantes a la candidatura quienes pusieron a Sanders contra las cuerdas. Los moderadores, en más de una ocasión, le pidieron que explicara cómo piensa financiar su plan de atención médica universal.
“¿Puedes hacer el cálculo para el resto de nosotros?”, preguntó Norah O’Donell de CBS.
Pero el senador por Vermont dio pocos detalles en su respuesta; se limitó a decir que el plan de salud que propone le ahorraría dinero a los ciudadanos estadounidenses.
Amy Klobuchar fue la primera que aprovechó el silencio, y usó la oportunidad para acusarlo de hacer “promesas falsas que suenan bien en una estampa en un coche”.
Control de armas
A lo largo de sus campañas, todos los aspirantes a la candidatura han recalcado que existe una necesidad de mayores revisiones a los antecedentes de quienes quieren comprar un arma. Sin embargo, Biden criticó a Sanders por no siempre haber pensado así.
“Ciento cincuenta millones de personas han sido asesinadas desde 2007, cuando Bernie votó para eximir de responsabilidad a los fabricantes de armas”, criticó Biden. “Nuestras calles se han convertido en una carnicería”.
“He emitido miles de votos”, contestó Sanders entre abucheos. “Me equivoqué en esa votación”.
No todo lo que tenga que ver con Fidel Castro es malo
El senador fue cuestionado sobre un comentario reciente en el que aseguró que sería injusto decir que todo lo que hizo el régimen de Fidel Castro en Cuba fue malo.
Frente a las críticas, Sanders sostuvo su postura. “Cuando las dictaduras hacen algo bueno, lo reconoces”, aseguró. “No les envías cartas de amor”, agregó antes de repetir que condenaba el autoritarismo.
Beneficio para Trump
Tom Steyer, quien es uno de los aspirantes demócratas peor ubicados en las encuestas con apenas el 2% de la preferencia electoral, aprovechó para criticar a Sanders y Bloomberg al mismo tiempo. Dijo que el Partido Demócrata se enfrenta al grave riesgo de “elegir a un radical socialista o a alguien que lleva siendo republicano mucho tiempo”.
“Si nos vamos a cualquiera de esos dos extremos corremos el riesgo de ir hacia la reelección de Donald Trump”, puntualizó.
