por Juan Pablo Espinosa
El sentimiento en las Grandes Ligas es casi unánime, los peloteros están molestos y en serio con los Astros de Houston. No sólo por el sistema para robar señales que implementaron, sino también por el hecho de que ningún pelotero en activo fue sancionado por Rob Manfred, Comisionado de la MLB.
Conforme han comenzado los campos de entrenamiento, son cada vez más las voces de molestia no sólo de las novenas directamente afectadas como Yankees y Dodgers, también de prácticamente todos los peloteros de la Liga pues consideran que se han roto códigos no escritos además de las reglas establecidas.
“No voy a dejar que olviden el hecho de que son hipócritas, que son tramposos. Le han robado mucho a otras personas, y al juego mismo”, comentó Trevor Bauer, abridor de los Rojos de Cincinnati.
“Una de las peores cosas que podrían pasar es que pase el entrenamiento primaveral y nos olvidemos de todo. Que nos importe los primeros dos juegos y luego se olvide. Necesita ser reiterado, dijo el pitcher de los Dodgers Ross Stripling y a quien los Astros le conectaron de manera sólida en aquella Serie Mundial de 2017.
Otro de los lanzadores que fue vapuleado en el aquel Clásico de Otoño fue terminante en su juicio, “en los Olímpicos, si los jugadores hacen trampa no pueden tener una medalla de oro. Pero ellos todavía tienen un título de Serie Mundial” sentenció el japonés Yu Darvish.
Y es que las disculpas, tanto del dueño de los Astros Jim Crane, como de los jugadores no fueron consideradas auténticas, ni muestran un verdadero arrepentimiento.
“Creo que sus disculpas fueron lo que sea. Las disculpas de Jim Crane fueron débiles. El castigo de Manfred fue débil dándoles inmunidad. Estos tipos hicieron trampa por tres años. La gente no comprende que Altuve le robó un a MVP a Judge. Todo mundo sabe que nos robaron un anillo”, comentó molesto Cody Bellinger.
“No hay sinceridad. No hay nada genuino. Si hubiera cometido un error de ese tamaño, sería el primero en hacerles saber que gran lío hubiera sido. Es difícil de creer. De verdad lo es. Es triste.
“Estoy muy seguro de que sucedió también en 2018 y 2019. Si no los hubieran descubierto lo seguirían haciendo. Sólo se discupan porque fueron descubiertos. Todo mundo en la Liga está molesto y con razón, porque es una desgracias para el juego”, sentenció Kris Bryant de los Cachorros de Chicago.
Sanciones insuficientes
Prácticamente todos los estelares de la Gran Carpa han expresado su descontento tanto con los jugadores de los Astros como con el comisionado Rob Manfred por aplicar sanciones demasiado blandas.
“Es algo triste para el beisbol. Es difícil. Hicieron trampa. No estoy de acuerdo con los castigos, con los peloteros no siendo sancionados. Fue un sistema manejado por jugados. Apesta que las carreras de varios fueron afectadas, personas perdieron sus trabajos. He perdido algo de respeto hacia algunos”, dijo uno de los rostros de la Liga, el jardinero Mike Trout.
Sin embargo, si hay un deporte que ejecuta a la perfección sus códigos no escritos es precisamente el beisbol y de este modo varios peloteros han sido enfáticos en que si la MLB no fue lo suficientemente estricta con sus sanciones, ellos lo serán en el diamante.
Vendrán los golpes
Lanzadores como el propio Stripling, Bauer, Alex Wood y Mike Clevinger han declarado que no tienen problema en golpear a los bateadores de los Astros, pues estos fallaron al honor del juego y como tal deben ser castigados.
Dusty Baker, manager de los Astros incluso ha pedido la protección de la Liga ante lo que él afirma serán ataques premeditados que pueden lastimar y poner en riesgo la carrera de sus peloteros.
Este drama apenas comienza, conforme avancen los entrenamientos primaverales y la temporada misma se verá la magnitud de las repercusiones y las reacciones de una gremio que parece no olvidará este escándalo tan fácil
