- Las anegaciones también ocurren en el sur de Tennessee
Un invierno lluvioso en Mississippi provocó la crecida del río Pearl, que cientos de personas fueran evacuadas de sus hogares y que habitantes de la zona baja estén en peligro de padecer más afectaciones.
Para liberar el agua del río, las autoridades aguardan para dejar correr los depósitos llenos, debido a que la acción impactaría en las casas de quienes viven donde desemboca el cauce del Pearl.
Por fortuna no hay heridos ni muertes tras las inundaciones, pero las autoridades saben que los daños aún son incuantificables.
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Los habitantes, según reportan los medios locales, temen encontrarse con las carreteras dañadas, problemas con las tuberías de agua y el alcantarillado.
En el área de Jackson pocos han podido regresar a su casa, ni en la zona sur que colinda con Tennesse, mucho menos con el pronóstico de que las lluvias continuarán durante la semana.
Las escenas más dramáticas incluyen el deslizamiento de dos casas en Savannah, que pasaron por un acantilado fangoso hacia el río Tennessee, aunque sus residentes habían huido antes.
Para la gente y los funcionarios locales, el fenómeno natural se asemeja a que “jugaran un partido de ajedrez con la madre naturaleza”, como calificó Jim Hopson, portavoz de la Autoridad del Valle de Tennessee a la tragedia.
Con información de Agencias.
