Ousmane Dembélé: El futbolista más ‘delicado’ del mundo

Ousmane Dembélé. (Foto: Shutterstock).
Desde su llegada a Barcelona en 2017 se ha lesionado 10 veces, cuatro en la presente temporada y acaba de ser operado, por lo que estará seis meses fuera de las canchas.

“Soy zurdo, pero chuto mejor con la derecha”… Así solía definirse Ousmane Dembélé, un chico nacido en en Évreux, pequeño municipio francés con menos de 50 mil habitantes, situado en la Alta Normandía.

De origen humilde y poco afecto a la escuela, ‘Ous’, como lo apodan desde pequeño, pasó su infancia jugando futbol en un parque cercano a su casa.

“Se pasaba el día jugando con el balón, yo era bastante estricta con sus salidas, pero lo aceptaba porque él solo quería jugar y jugar. Se pasaba horas. No era como otros niños, él era feliz con un balón y desde pequeño sabía que quería ser profesional”, contó la madre de Dembelé en una entrevista con el diario francés ‘L’Equipe’.

Tuvo que ser el papá de un amigo de Ousmane, quien al percatarse del talento del niño, lo inscribió en un equipo de Évreux, donde de inmediato llamó la atención por sus condiciones que debían someterse a la disciplina de los entrenamientos.

“Le repetí muchas veces que jugar solo no era suficiente y él supo ponerse al servicio de los demás, cosa que no hacía al principio. Me escuchó. Enseguida vi que estaba bien asesorado por su familia. Además su mentalidad es muy buena. 

“Por eso creo que se puede esperar mucho de él porque tiene mucha determinación y perseverancia. Sabe  muy bien lo que quiere”, platicó a ‘L’Equipe’, Grégory Badoche, su primer entrenador.

Con apenas 13 años, los clubes Le Havre y Caen, pretendían ficharlo, pero se les adelantó el Rennes, que también lo seguía de cerca, y tras convencer a la madre y hermanos de ‘Ous’, el delantero dio un salto gigante rumbo a su sueño de convertirse en futbolista profesional.

Dembéle ingresó a las categorías infantiles del Rennes en 2014 y en tan solo un año fue promovido al primer equipo y firmó un contrato como profesional. 

Al principio padeció porque el entonces técnico del club, Philippe Montanier, no le daba minutos y eso tenía inconforme al joven que ya desde aquel momento sabía que otros equipos, incluso fuera de Francia, lo tenían en la mira.

En mayo de 2016, Ousmane firmó por cinco temporadas con el Borussia Dortmund, que le pagó 15 millones de euros al Rennes por el juvenil atacante.

“Tiene un perfil muy atípico, nunca puedes prever lo que va a hacer, no hay muchos como él, cuando coge el balón puede pasar cualquier cosa.

“Antes quería driblar a tantos jugadores como pudiera, después su juego evolucionó y se le enseñó a no abusar del individualismo y a no hacer acciones inútiles”, dice Badou Sambagué, abogado del jugador por el que Barcelona pagó 105 millones de euros en 2017.

UN CALVARIO AZULGRANA

Fue en aquel verano de 2017 cuando Dembélé daba el salto decisivo en su carrera al llegar a uno de los mejores equipos del mundo, mientras que el Barça apostaba todo por un chico de 20 años que solo era una gran promesa.

Le costó mucho trabajo entender la dinámica de asociación del club, pues su juego era desordenado e individualista; sin embargo, de a poco fue entendiendo que las carreras desbocadas por la banda no tenían cabida cuando se juega al lado de Lionel Messi y bajo una filosofía de elaboración.

A los problemas de adaptación se sumó algo más grave que lo tiene estancado: las lesiones… Los números son reveladores: Se ha lesionado en 10 ocasiones (ocho musculares y dos esguinces), se ha perdido 73 partidos de 147 posibles en más de dos años, y en la presente temporada son cuatro las ocasiones en que se ha lastimado.

La última, la más grave, pues sufrió una ruptura del tendón proximal del bíceps femoral del muslo derecho, por lo que ya fue intervenido y estará seis meses fuera de las canchas.

Ahí va de nuevo Dembélé contracorriente a iniciar una larga rehabilitación. Más que un caso médico, se ha vuelto hasta sicológico… El futbolista más ‘delicado’ del mundo.

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