Por: Carlos Dragonné @carlosdragonne
Si hace unos años me hubieran dicho que el director de la saga de comedia de pastelazo “The Hangover” estaría nominado a Mejor Director no sólo en los premios Oscar, sino en casi cualquier ceremonia de premios hubiera hecho justo lo que no conseguí en la saga mencionada: reírme. Pero ahora Todd Phillips no sólo tiene la nominación, sino que tiene bastantes posibilidades de negarle el último homenaje a un ícono del cine. ¿Cuáles son sus apuestas?
Vamos por partes. Los nominados a esta categoría son Bong Jong Ho por “Parasite”; Sam Mendes por “1917”; Martin Scorsese por “The Irishman”; Quentin Tarantino por “Once Upon a Time… in Hollywood”; y el propio Phillips por “Joker”. Tarantino queda fuera por causas naturales -nunca le van a dar un premio al enfant terrible. Fuera de ese dato, la categoría está bastante complicada. Hay quienes dicen que Scorsese se llevaría el premio como una especie de reconocimiento al proyecto más complicado de su vida. Pero la verdad es que dársela por una de sus cintas más débiles me parece un tanto absurdo. Además de que Scorsese no necesita validación de ningún lado.
Phillips tiene una amplia posibilidad, aunque Joon Ho se perfila para repetir la victoria de los Globos de Oro. ¿Vale la pena apostar por él? Sí, sin duda. Aunque la pericia de Mendes en la cinta bélica fotografiada por Roger Deakins es extraordinaria, lo que el surcoreano logra para transmitir las emociones de sus personajes es lo segundo más destacable del año.
¿Segundo? Sí… porque a mi gusto, la Academia dejó fuera a la mejor dirección del año: Noah Baumbach con “Marriage Story”. Pero con un director de Netflix era suficiente…
